El campo de batalla es una ladera de una montaña, tratase de un terreno muy escarpado, lleno de rocas de todos los tamaños y lo suficientemente puntiagudas como para hacerse un feo corte. Por lo demas hay hierba en el suelo y algun que otro arbol en la zona. La pendiente del lugar es de aproximadamente el 23%.
Rin esta frente a su rival, a unos 10 metros. Estan ambos a la misma altura, mirandose y pensando en que estrategia van a usar, pues eso se trata del examen de chunnin. Con un gracil movimiento Rin se pone el pelo detras de la oreja, otra vez le tocaba hacer frente a ese tipo de examenes. Estaba harta de que solo valorasen a las kunoichi por su capacidad en una pelea, ella sabia perfectamente que eso no lo era todo. Debian de valorar otras cosas, su capacidad de pelea era un tanto reducida, su especialidad era confundir y proteger a los otros miembros de un equipo. Pero en fin, eso era lo que le tocaba. Suspiró. Observó a su rival, era otra kunoichi, no la conocia de nada ni sabia lo que le podia llegar a hacer. La saludó con la mano, se entretendria a charlar con ella, pero eso era un examen, asi que se deberia conformar en felicitarla después, cuando la hubiese humillado. Se pusó en posición defensiva, adelantando un tanto su pierna izquierda, y flexionando las rodillas. Guardaria sus ases bajo la manga, haber si conseguia sorprender a su rival y en un arrebato de buena suerte, ganarla. Esperó.